Todos los años millones de personas son afectadas por robos de identidad y de datos personales en todo el mundo. Es innegable la necesidad de contar con métodos más seguros para almacenar, transferir y verificar información. Y a pesar que se ha avanzado mucho para mejorar la seguridad del manejo de la identidad, existen limitaciones estructurales en los sistemas actuales para resolver este problema.
Entre los muchos casos de uso emergentes de la tecnología Blockchain, la gestión y verificación de identidad digital es quizás uno de los más prometedores. En este contexto, los sistemas Blockchain pueden aportar soluciones valiosas a algunas de las dificultades que enfrentan la mayoría de las bases de datos centralizadas.
La identidad personal es uno de los derechos humanos fundamentales según el Artículo 8 de la Convención sobre los Derechos del Niño de la ONU. En su nivel más básico, la identidad consiste en nombre y apellido, fecha de nacimiento, nacionalidad y alguna forma de identificador nacional como pueden ser el número de pasaporte, documento nacional de identidad, o licencia de conducir.
Muchas veces ignoramos la importancia de la identidad porque la consideramos como algo dado. Sin embargo, sin una forma válida de identificación, uno no puede ser dueño de una propiedad, votar, recibir servicios del gobierno, abrir una cuenta bancaria o encontrar un empleo.
Con el avance de internet y los servicios de información actuales, los datos de identidad personal son almacenados y administrados centralmente en la red por entes u organismos estatales. Asimismo, los datos de identidad personal y los que uno suministra en una determinada plataforma, o mismo para realizar una compra en red, conforman lo que denominamos identidad digital. Y toda esta información es almacenada por empresas que manejan la información de manera centralizada.
Como hemos mencionado, todos los datos relativos a nuestra identidad digital son almacenados y administrados de manera central. Y esta centralidad conlleva tres problemas principales: el mal manejo y uso de la información, el robo de información y duplicación de identidades, y el monopolio de otorgamiento y validación de la información por parte de unos pocos.
Fraudes en tarjetas de crédito son muy habituales en la vida cotidiana de usuarios que realizan compras por internet. Divulgación de información personal administrada por compañías públicas y privadas por parte de hackers son moneda corriente. Y durante los últimos años han sido muy resonantes los casos de mal uso de los datos por parte de compañías como Facebook. Asimismo la posibilidad de cambiar registros de forma unilateral da lugar a actos de corrupción de diversa índole.
Dados los problemas planteados en la administración de identidad digital y las características propias de la tecnología Blockchain, sus beneficios resultan casi obvios. Los atributos de descentralización, inmutabilidad y transparencia, sumados a la incorporación de contratos inteligentes, permiten que la tecnología Blockchain encuentre muchas de las soluciones a los problemas planteados en este campo.
De los atributos más importantes de la tecnología en este campo encontramos los de la seguridad e inmutabilidad. Una vez almacenada la información no se puede modificar o cambiar, salvo por el consenso de toda o una mayoría de los nodos de la red (descentralización). Asimismo, la transparencia otorgada por la tecnología blockchain reside en que todos los nodos pueden ver los datos que se han ingresado en la cadena de bloques, pudiendo verificar y controlar cuándo y por quiénes los datos fueron modificados.
Es importante aclarar que un sistema de identidad basado en blockchain no requiere necesariamente del intercambio directo o explícito de información confidencial. En su lugar, los datos digitales pueden compartirse y autenticarse mediante el uso de técnicas criptográficas, como funciones de hash, firmas digitales y las denominadas pruebas de conocimiento cero (ZK, de sus siglas en inglés Zero Knowledge).
Mediante el uso de algoritmos hash, cualquier documento puede convertirse en una larga cadena de letras y números. En este caso, el hash representa toda la información utilizada para crearlo, haciendo las veces de huella digital. De esta manera, las instituciones gubernamentales o de confianza pueden proporcionar firmas digitales para dar validez oficial a un documento.
Por otro lado, las pruebas de conocimiento cero ZK hacen posible que las credenciales o identidades se compartan y autentiquen sin la necesidad de revelar información sobre ellas. En un ejemplo concreto, alguien podría usar pruebas ZK para demostrar que tiene la edad suficiente para conducir, o ingresar a cierto establecimiento, sin tener que revelar la fecha exacta de su nacimiento.
El concepto de identidad auto soberana se refiere a un modelo en el que cada individuo tiene control total sobre sus datos, los que podrían almacenarse en billeteras personales (similar a las billeteras de cripto). De esta manera, uno podría decidir cuándo y cómo y cuánto compartir de su información. Por ejemplo, alguien podría almacenar sus credenciales de tarjeta de crédito en una billetera personal y luego usar su clave privada para firmar la transacción y realizar la compra.
Consideramos que la implementación de la criptografía y la tecnología Blockchain en la identidad digital beneficiaría en gran medida al sector. Los usuarios tendrían mayor consciencia y control sobre cómo y cuándo utilizar su información personal. Esto reduciría significativamente los peligros asociados con el almacenamiento de datos confidenciales en bases de datos centralizadas. Además, las redes blockchain podrían proporcionar mayores niveles de seguridad y privacidad mediante sistemas criptográficos. Como se mencionó, los protocolos a prueba de conocimiento cero permiten a los usuarios probar la validez de sus documentos sin la necesidad de compartir detalles sobre ellos.
Otro beneficio reside en la mayor confiabilidad que la que proveen los sistemas actuales. Los sistemas blockchain harían más difícil para una persona falsificar información y podrían proteger eficazmente todo tipo de datos contra fraudes.
Algunos de los proyectos blockchain más relevantes trabajando en identidad digital son:
Sovrin: La Fundación Sovrin es una organización sin fines de lucro dedicada a habilitar la identidad digital auto soberana. Sovrin ofrece confianza, control personal y facilidad de uso de identificaciones analógicas en Internet.https://sovrin.org/
Civic: Civic es un protocolo de verificación de identidad personal que aprovecha la tecnología de contabilidad distribuida para gestionar mejor las identidades digitales. Utilizando la plataforma de identificación digital, el usuario puede crear su propia identidad virtual y almacenarla junto con información personal en el dispositivo.https://www.civic.com/
uPort: uPort fue desarrollado por ConsenSys y es un sistema de identidad autónomo basado en la red Ethereum. Contiene contratos inteligentes, bibliotecas de desarrollador y una aplicación móvil. Los usuarios pueden crear y almacenar información personal e identidad a través de contratos inteligentes con la clave que posee la aplicación móvil, pero la identidad se puede recuperar si se pierde el dispositivo.https://www.uport.me/
La tecnología Blockchain tiene un gran potencial para cambiar la forma en que se verifican, almacenan y comparten los datos digitales hoy en día. Si bien muchas nuevas empresas ya se encuentran explorando las posibilidades, hay mucho por hacer. Sin duda veremos más servicios centrados en la gestión de identidad digital en los próximos años. Y lo más probable es que blockchain cumpla un rol central en la misma.